"Sin querer queriendo - Memorias" de Roberto Gómez Bolaños "Chespirito"
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"Sin querer queriendo- Memorias” es una autobiografía que nos permite conocer muchas facetas del genio mexicano Roberto Gómez Bolaños, considerado un ícono del humor de habla hispana, quien nació en 1929 y nos dejó en 2014.
Detalles sobre su infancia, su familia, su ingreso y comienzos en el mundo del espectáculo, sus tropiezos y dificultades, sus progresos en la vida debido a su enorme talento, la evolución de su carrera como escritor, guionista, compositor, actor, director y productor, su incursión en la televisión, el cine, el teatro y finalmente su interés en la política de su país se ven plasmados en la obra.
Se devela el misterio: también cuenta porque lo llamaban Chespirito (pronunciación españolizada del apellido de William Shakespeare, apodado así debido a su estatura y por su habilidad para escribir historias), cómo era la relación con los compañeros de elenco que lo acompañaron durante muchos años y no faltan sus impresiones acerca de los diferentes lugares del mundo ─y su opinión sobre la política de los mismos─ que recorrió tanto en plan turístico como en las giras.
Describe el proceso de la creación de sus personajes entrañables dirigidos a toda la familia: el Chavo, el Chapulín Colorado, el Doctor Chapatín, el Chómpiras y Chaparrón Bonaparte (con la particularidad de que todos los nombres empezaban con la letra “Ch”, que en un principio fue casual y cuando se dio cuenta lo hizo reiterativo, según comentó al respecto en una entrevista) y que fueron tan exitosos que algunos de sus latiguillos se volvieron muy populares, por ejemplo el conocido “no contaban con mi astucia” (vale aclarar que el programa televisivo estuvo al aire casi 25 años, un cuarto de siglo haciendo reír a varias generaciones y unos cuantos años más con las repeticiones).
Todo el relato está salpicado por anécdotas simpáticas como la del espectador que perdió su dentadura postiza debido a las carcajadas que le produjo un espectáculo teatral suyo. Una personalidad que recibió tanto reconocimientos a la trayectoria como cuestionamientos. Y las memorias, muy amenas por cierto, se van leyendo como dice el título del libro (que utilizó otro de los latiguillos de uno de sus personajes) "sin querer queriendo"...
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