Universo Kosice en la Noche de los Museos

El sábado 4 de noviembre, y luego de una ausencia de 8 años, el Museo Kosice volvió a abrir en la Noche de los Museos y recibió casi 1.200 visitantes que pudieron disfrutar las obras de Gyula Kosice. Un detalle muy especial fueron las visitas guiadas realizadas por el cálido nieto del artista.

Ubicado en el barrio de Almagro de la Ciudad de Buenos Aires (Humahuaca 4662) y funcionando en lo que hace años era su taller, alberga más de 200 obras ―hasta el 2004 se encontraban diseminadas en museos y colecciones privadas de todo el mundo―. Para poder contar con un espacio único que reuniera sus creaciones refaccionó su taller y lo convirtió en museo, institución que ahora se dedica a la conservación y difusión de su producción a nivel local y mundial. Colores, luces, sonido y movimiento deslumbran y asombran en su interior. Fue Declarado de Interés Cultural por la Legislatura Porteña.

El Universo Kosice: nació en el seno de una familia Húngara, en la ciudad de Kósice, Checoeslovaquia (actualmente Eslovaquia) en 1924. Llegó al país a los cuatro años de edad. Naturalizado argentino. Migró a la Argentina con sus padres y sus dos hermanos. La travesía marítima en barco dejó el recuerdo imborrable de la inmensidad del agua y el cielo influyendo en sus obras. En su tarea artística cambió su nombre, Fernando Fallik, por el de su ciudad natal.

Escultor, pintor, teórico y poeta, considerado uno de los precursores del arte de vanguardia cinético, lumínico, e hidrocinético, y de la conjunción y sinergia del arte, la ciencia y la tecnología. Estudió dibujo y modelado en academias libres. Mayormente fue autodidacta.

Las obras que se encuentran en el museo están divididas por áreas: el recorrido inicia con las Pinturas Madí. Kosice fundó en 1946 junto a Rhod Rothfuss (artista plástico) y Carmelo Arden Quin (artista plástico y escritor) Arte Madí, el más importante movimiento artístico multidisciplinario y de vanguardia de la Argentina. Una “rebelión artística” para todas las ramas del arte (dibujo, pintura, escultura, música, literatura, teatro, arquitectura, danza, etc.) basada en llevar al extremo los conceptos de "creación" e "invención", con el fin de liberar la creación artística de las limitaciones "externas".

El origen del término estuvo siempre en discusión aunque no tiene un significado real. Redactó un manifiesto del movimiento.

En pintura, Madí recupera los principios del arte abstracto y geométrico. Con el objeto de romper los límites externos tradicionales de la obra de arte y liberarla de toda atadura, propone el marco irregular y recortado. Quebró con el concepto de ventana.

Comenzó con piezas de pequeño a mediano tamaño, de esmalte sobre madera, con multiplicidad de planos y colores, articulados y móviles. Más tarde fue ampliando las dimensiones.

En cuanto a las esculturas: se puede observar su primera escultura, Röyi, creada en 1944, la primera obra articulada y

móvil con participación del espectador del mundo, señalando los comienzos del arte cinético en América Latina. Luego realiza esculturas tridimensionales y sin color, siguiendo los lineamientos del arte Madí. Utiliza principalmente madera, y posteriormente el acero inoxidable, el aluminio y el bronce fundido. A finales de la década del 40 incorpora el acrílico con el que realizaría una gran experimentación, “jugaría”, a lo largo de los años.

También fue un pionero en obras de arte lumínicas: realiza la primera escultura con gas neón en la historia del arte contemporáneo, en 1946. Desde entonces, continuó explorando las posibilidades de elementos lumínicos e incorporando nuevas tecnologías como las luces led. Algunas obras lumínicas incluyen cinetismo y participación con el espectador y el aprovechamiento de procesos (como la inyección de aire en acrílico) cuyo resultado es azaroso (lo que luego tradujo en una filosofía de producción y de vida, “corregir el azar“).

Sus producciones más características son las obras hidrocinéticas e hidrolumínicas, con esferas y gotas, chorros de agua y burbujas, y juegos de luces y ruidos. Una gota de agua acunada a toda velocidad (1948) es la primera escultura con agua en la historia del arte contemporáneo.

En su afirmación “El hombre no ha de terminar en la Tierra“, anticipaba uno de sus principales proyectos: La Ciudad Hidroespacial. Está compuesta por maquetas, constelaciones, dibujos y fotomontajes. Nace a mediados de la década del 50, como resultado de su preocupación por la numerosa población de la Tierra y de la necesidad de romper con la arquitectura tradicional que ataba al ser humano. El artista propone entonces hábitats suspendidos a 1.000 – 1.500 metros sobre el nivel del mar, compuestos no ya por habitaciones sino por lugares para vivir móviles y poéticos. Llamó al conjunto de estas viviendas la Ciudad Hidroespacial, como proyecto urbano con una dimensión científica (la teoría de la energía suficiente para mantener volando una ciudad), poética, estética, arquitectónica y filosófica.

Asimismo pueden apreciarse fotografías de las obras monumentales en espacios públicos y privados que ha realizado en ciudades de todo el mundo, y de su encuentro con personalidades destacadas de la cultura internacional.

Fue merecedor de numerosos premios y declarado Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires, en 1997. Fue homenajeado en el Senado de la Nación en el 2006 y se le otorgó el Premio Cultura Nación en el 2007. La Secretaría de Cultura de la Nación le realizó un Homenaje a los 70 años de trayectoria en el 2012.

Sus obras se exponen en museos y colecciones privadas de la Argentina, América Latina, Estados Unidos, Europa y Asia.

Falleció a los 92 años de edad en el 2016. Siguió creando hasta sus últimos días.

Un pionero, un rebelde del arte, un soñador, un “juguetón” que dejaba que el azar lo sorprendiera. Fue un cultor del “porvenirismo” (su propuesta porvenirista fue el arte buscando cambiar la vida, partiendo de nuevas obras y de la construcción de nuevas ciudades, nuevas mentalidades, actividades y concepciones). Dijo al respecto: “una utopía lo es, hasta que deja de serlo”. Sus obras y museo reflejan fielmente su pensamiento.

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